La halterofilia femenina sigue ganando reconocimiento, y en 2019, España celebró un hito histórico gracias a Lidia Valentín. La leonesa se proclamó campeona del mundo, reafirmando su estatus como una de las mejores levantadoras de la historia.
En la modalidad de arrancada, Lidia inició con 110 kg, aumentó a 115 kg y finalizó con 118 kg. En la prueba de dos tiempos, esperó la actuación de sus rivales para iniciar con 130 kg, subiendo luego a 135 kg y cerrando con 140 kg. Con esta actuación, se redimió tras la lesión que la dejó fuera en 2015.
Su compatriota Alejandra Garza también dejó huella, finalizando en la novena posición con un Total Olímpico de 223 kg (100 kg en arrancada y 123 kg en dos tiempos).
La Halterofilia: Un Deporte de Fuerza y Estrategia
La halterofilia, o levantamiento de pesas, es una disciplina que consiste en levantar la mayor cantidad de peso posible en una barra con discos en sus extremos. Existen dos modalidades de competición:
- Arrancada: Se levanta el peso de una sola vez desde el suelo hasta la extensión total de los brazos sobre la cabeza.
- Dos tiempos o envión: Se permite una pausa en la altura de los hombros antes de completar el levantamiento.
Este deporte, con antecedentes que se remontan siglos atrás, se formalizó en Europa en el siglo XIX. La Federación Internacional de Halterofilia se fundó en 1905, y la disciplina fue parte de los primeros Juegos Olímpicos en 1896 y 1904, aunque la categoría femenina no se incluyó hasta Sídney 2000.
Equipamiento Esencial para la Halterofilia
Para la práctica de la halterofilia, se requiere material especializado, entre los que destacan:
Barras de halterofilia
- Para mujeres: 2 metros de largo, 25 mm de agarre, 15 kg de peso, capacidad de hasta 1.000 libras.
- Para hombres: 2 a 2,20 metros de largo, 20 kg de peso, 4 rodamientos, capacidad de hasta 1.500 libras.
Discos
- Pesos disponibles: 0.5 kg, 1 kg, 1.5 kg, 2 kg, 2.5 kg, 5 kg, 10 kg, 15 kg, 20 kg y 25 kg.
- Discos bumper, tanto en colores oficiales como en negro.
Otros materiales
- Tacos de altura
- Bancos y plataformas
- Magnesia para mejorar el agarre
Lidia Valentín: Un Ícono del Deporte
Desde pequeña, Lidia practicaba baloncesto y atletismo, pero fue la halterofilia la que cambió su vida. Su mentalidad competitiva la llevó a entrenar con intensidad en un gimnasio donde la mayoría eran hombres.
“Cuando el de al lado levantaba más que tú, te ponías más kilos. Me gustaba la competencia. Si yo levanto más que tú, soy mejor”.
A lo largo de su carrera, ha derribado mitos y prejuicios sobre este deporte. “El entrenamiento es el mismo para hombres y mujeres, no hay diferencias ni debería haberlas”.
Lidia también desafía los estereotipos sobre la halterofilia y el cuerpo femenino:
“No hay un prototipo de cuerpo para una levantadora. No puedes saber si una mujer hace halterofilia solo con verla”.
Rompiendo Barreras en el Deporte Femenino
El interés de las mujeres en la halterofilia sigue creciendo, a pesar de los cánones de belleza que aún persisten. Según Lidia, cada vez más mujeres entrenan con pesas porque buscan fortaleza y salud, no solo estética:
“De nada sirve tener 90-60-90 si estás flácida. Mis amigas no quieren estar blanditas, quieren estar fuertes”.
Más allá del físico, la halterofilia es un deporte que exige preparación mental y determinación. “La clave está en la concentración. En el momento de levantar las pesas, todo depende de tu estado mental”.
Lidia Valentín es un referente, no solo por sus títulos, sino por su mensaje: la halterofilia es para todos, y las mujeres tienen un papel clave en su crecimiento.